Viví muy de cerca
la clasificación agónica
de nuestra selección de futbol
fue por repechaje ante una
modesta selección de Nueva Zelanda.

Crearon un falso estratega
por clasificarnos después de
36 años. Hicieron también falsos
héroes, a Guerrero y Farfán.

En el primer partido nos eliminaron
En el segundo se confirmó, que ni
con Gareca ni Oblitas se pudo salvar
se jugó como nunca y se perdió como
siempre.

65 mil peruanos viajaron a Rusia
Cerca de 40 mil lo hicieron desde el Perú
el saldo de diferentes partes del mundo
los animaron de eso, viaje hoy y pague después.

Muchos hipotecaron sus departamentos, otros
sus casas y algunos vendieron sus autos
querían ver a la blanquiroja en Rusia,
Dinamarca nos ganó y Cueva perdió un penal.

Don Emilio, dicen que Ud. vendió su auto
para ver jugar a nuestra selección
en Rusia, así es, después de que nuestra selección
fue eliminada, conocí San Petesburgo, Belgrado,
Samara, Rostov y el bello Moscú, bellas ciudades.

Quiso irse a conocer Siberia,
los montes Urales, pero el tren
transiberiano no le permitieron
que viajara a ver de cerca a la temida Siberia.

Don Emilio decidió conocer las zonas
periféricas de San Petesburgo y ver
de cerca la realidad Moscovita, e
ingreso a una taberna donde sólo servían
Vodka de mala calidad y se escuchaba música.

Lenta con instrumentos desconocidos para mí
no eran guitarras o banyos, tenían forma
triangular llamada “Balalaika” que el sonido
comienza grave, hasta distender como
avanza la música y las caras se ponen tristes.

La música rusa, son como los tristes con Fuga
de Tondero Peruanos, los violines y flautas
más las Balalaikas, te hacen ver que el
ritmo cadente ruso, es tan similar
a lo nuestro, tristes y miserables como los que
viven en los Andes Quechuas.

De regreso a Lima, he vuelto a mi
Puente Piedra querido, los humores
de la gente que me había olvidado, ya no tengo
auto, ahora tomare micros para ir a trabajar
y soportar los hedores de los compañeros de
viaje en estos duros días de invierno.

Aquí estoy decepcionado de la dirigencia
Peruana de futbol, nunca más voy a ver un
Partido de nuestra Selección Nacional,
voy a ver telenovelas brasileñas o mexicanas
que también me hacen llorar inconsolablemente.