Allá en la Basílica
donde se encuentra
nuestra Virgen milagrosa
apretaste mi diestra
en señal de amor y expresión sincera.

En tu mirada, hay deseo
de amar, y entrega segura
no como aventura, sino, ternura
cual inquieta criatura.
que nunca a sufrido un mal.

Ella dice que me adora
y a veces llora, no la comprendo
el llanto es de alegría, es
como ella quería
que soy su idolatría.

Ya vendrán esos días
de felicidad plena
amar y comprender, no es ajena
siempre estará a medido
sin condición alguna.

La Virgen del Tepeyac
nos va a bendecir allá
donde el juramento es sagrado
y la unión matrimonial conduce
al cielo, mas nunca estaré solo.

Estribillo
Yo estoy con ella y me voy con ella
donde está la estrella como ayer, hoy sé
que Dios medió lo mejor: Esa eres Tú.